Empresa y seguros (I): ¿sólo externos?

¿Se han parado a pensar porqué las compañías aseguradoras obtienen tantos beneficios?

Paradójicamente, la razón es porque es un sector con muy poco riesgo. Podríamos decir que es un sector de negocio que siempre va sobre 'seguro'.

Básicamente, (si simplificamos mucho la operativa), la mecánica de un seguro consiste en captar clientes dispuestos a pagar un importe pequeño en periodos de tiempo cortos, para proteger daños probables que se pueden dar en periodos de tiempo, muy probablemente, largos; y, además, que estadísticamente sea siempre así.

Pensemos en la muerte. Pensemos en lo que cuesta que entierren a un fallecido. Y, pensemos cuantos enterramientos ha pagado el difunto a lo largo de su existencia, a razón de muy pocos euros mensuales.

Supongamos que a la persona fallecida se le empezó a pagar la póliza de decesos cuando apenas tenía un año, ya que al padre le preocupaba que si le ocurría algo a su hijo, no se le pudiese enterrar dignamente; y después, pues ya que se estaba devengando, el difunto continuó pagándola, por si acaso. Por ejemplo, si el difunto, (estando en vida), pagó todos los meses como media, a lo largo de toda la vigencia de la póliza, 7,50 €/mes, y, el difunto vivió 70 años, la aseguradora habrá ingresado por esta póliza: 7,50 € x (12 meses x (70 años - 1 año)) = 6.210,00 €

Un enterramiento 'normal', ¿qué puede costar?, ¿1.500,00 €, 2.000,00 €?

Podemos considerar que el asegurado paga dos o tres veces lo que le puede costar si lo paga en el momento del devengo. Pero, no nos equivoquemos, los dos ganan, tanto el asegurado como el asegurador. Al fin y al cabo, todo lo que se asegura, termina siendo positivo para los dos partes, ..., ..., ..., ..., salvo por pequeños detalles 'sin importancia', como las 'pequeñas letras' de cualquier póliza de seguros, ..., las condiciones 'susurradas' de forma que, ni se entienden, ni se escuchan, y, por supuesto, ni se pueden oír, por la sencilla razón de que no venden; son condiciones ilegibles, que se camuflan para que sean imperceptibles entre una profusa maraña de artículos, cláusulas, capítulos y títulos.

Para evitar estas desagradables situaciones, además de mejorar las percepciones de las aseguradoras y, por supuesto, mejorar la financiación de las empresas, en la próxima entrada de la semana que viene, continuaremos con el desarrollo de este concepto: los seguros en la empresa, ¿sólo externos?

Mientras tanto, la primera cita del año es para recordar a un grande, con una de sus frases que, ya hace unos cuantos años, me hizo dar con la clave de la diferenciación; la ciencia, la filosofía y la literatura no son lo mismo, del mismo modo que un Excel, un Word y un Access, no se usan para lo mismo. Piénsenlo.

"Siempre he pensado que la literatura no nació para dar respuestas, tarea que constituye la finalidad específica de la ciencia y de la filosofía, sino más bien para hacer preguntas, para inquietar, para abrir la inteligencia y la sensibilidad a nuevas perspectivas de lo real".

Julio Cortázar

Empezamos el año con un video musical moderno, movido, que el cuerpo quiere seguir, sin mucha profundidad musical. Para que el inicio del ejercicio no nos sea de mucho pensar. Vayamos poco a poco, que, aunque no lo parezca, el año es largo y todavía no ha hecho más que empezar.




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