Liquidez financiera conseguida a partir de los costes laborales.

Aprovechando que, como dice mi estimado amigo José Vicente Verdú, estamos al inicio de la 'vuelta al cole', hoy voy a explicar técnicamente, como conseguir una liquidez financiera nada desdeñable, gracias a los costes laborales o a pesar de ellos, según como se mire.

Vaya por delante, que este tipo de entradas no las desarrollaré con asiduidad, ya que requiere de ciertos conocimientos demasiados técnicos y en definitiva, no es el fin propio de este blog, que como reza al principio, está más dirigido a reflexionar sobre 'Utilidades y principios para mejorar el resultado obtenido por nuestro esfuerzo. Reflexiones para una sana controversia'

Pero lo prometido es deuda y esta entrada se la debo a un buen profesional de la contabilidad financiera, Santiago García, que me planteó sus dudas y la necesidad de matizar el contenido de unas reflexiones mías realizadas en anteriores entradas.

Una de ellas fue el pasado 19 de mayo, donde os hablé de lo que en mi opinión es uno de los defectos en la contabilidad financiera: la realidad de los costes laborales.

Dicha opinión, la amplié en mi entrada del 26 de mayo pasado, la contabilidad financiera: pura seducción en formas sugerentes, cuyo contenido era ampliado de forma más técnica en la pestaña de Técnicas contables que podéis ver al principio, justo a la derecha de la pestaña de Entradas publicadas. (Ésta última la he actualizado con una nota al final de la exposición, en la que aclaro una cuestión importante sobre la forma de calcular todos los importes de los salarios devengados).

Y como colofón a las reflexiones sobre este asunto, he desarrollado una hoja de cálculo muy simple, en la que podéis visualizar el asiento completo de los salarios devengados por cada mes y cada empleado, que nos permitirá registrar en una contabilidad financiera por partida doble, el control sobre los costes laborales y la liquidez financiera que podemos conseguir en el medio plazo.

Como podréis observar, los importes líquidos que se van acumulando en la cuenta de tesorería 574, pueden llegar a ser muy importantes si los vemos desde la perspectiva de un medio plazo; en la mensualidad es un importe escaso, (lógicamente, dependiendo del volumen salarial de la empresa), pero al acumular los meses por el número de empleados y esto por las anualidades de un medio plazo, (entre tres y cinco años), dispondremos de una liquidez muy saneada.

A esto, hay que añadir dos cuestiones básicas: la primera, que lo que se ahorra para las extras y las vacaciones, puede tener una rentabilidad financiera como depósitos a seis meses, hasta que tengamos que hacer uso de esos ahorros para el fin que los hemos creado; la segunda, que lo que ahorramos para posibles contingencias por indemnizaciones, tienen la ventaja de que sólo se usarán en el caso de despidos y siempre que el fallo judicial sea en nuestra contra, pero mientras esto ocurre, podemos rentabilizar muy bien estos importes de la cuenta 574.

Os invito a que visitéis la pestaña Hojas de cálculo, (está situada donde están las pestañas, al inicio de la entrada publicada, es la última a la derecha), en ella tenéis acceso a una hoja de cálculo en la que podéis apreciar todo lo que os he explicado en esta entrada.

Espero que, primero, os sea de utilidad, y segundo, que me comentéis vuestra opinión, que como siempre, será muy bien recibida.


Comentarios